
¿Desea añadir un poco de vegetación vibrante a su espacio interior? Piense en el jazmín brasileño. Una de estas exuberantes plantitas puede transformar tu salón en un paraíso tropical.
Además, esta resistente planta de interior debería durar años con un poco de atención y cuidados, así que déjanos enseñarte cómo se hace. Así que coge la regadera y la paleta: ¡es hora de ponerse a cultivar!
Suelo
Analítica
Hay que tener en cuenta algunos aspectos esenciales del suelo para mantener el jazmín de Brasil feliz y sano. En primer lugar, utilice un suelo que drene bien para que el exceso de agua pueda escapar rápidamente de las raíces.
La tierra especial para viñas o una mezcla de 1/3 de musgo de turba, 1/3 de perlita y 1/3 de marga es una combinación estupenda. Para fertilizarla, aliméntala una vez al mes con un abono equilibrado diluido a la mitad; esto le aportará los compuestos orgánicos necesarios que necesita para prosperar.
En cuanto a los niveles de acidez, procura que tengan un pH de 6-6,5 y de 4-4,5 en suelos arcillosos, para que el jazmín de Brasil prospere y florezca como siempre soñaste.
Agua
Las plantas de jazmín brasileño necesitan un suelo húmedo pero bien drenado para desarrollarse. Es fundamental que los cinco centímetros superiores del suelo permanezcan húmedos pero no saturados en todo momento.
Sin embargo, como ocurre con todas las plantas amantes de la tierra húmeda, un exceso de humedad puede provocar la pudrición de las raíces e infecciones fúngicas, por lo que es esencial asegurarse de que cualquier planta en maceta tenga un drenaje adecuado y no regarla nunca en exceso.
Si se cultivan al aire libre en climas cálidos, los jazmines brasileños deben regarse aproximadamente una vez a la semana durante su crecimiento activo y más a menudo en épocas de calor. Las plantas de jazmín de Brasil pueden dar vida a su jardín con sus hermosas flores y verdes hojas si se les proporcionan los cuidados y condiciones adecuados.
Luz y humedad
Cultivar plantas de jazmín de Brasil es un pasatiempo gratificante que requiere una cuidadosa atención a sus necesidades de luz y humedad. Para que la planta se mantenga sana, debe estar a la sombra parcial si se coloca en el exterior, ya que el jazmín de Brasil no se desarrolla bien bajo la luz solar directa.
La sombra ligera garantiza que la tierra se mantenga húmeda, pero las hojas pueden recibir sol durante todo el día. Sin embargo, si tu jazmín brasileño está en el interior, deberás asegurarte de que reciba mucha luz solar indirecta.
Además, mantener la tierra uniformemente húmeda reproduce un ambiente de humedad tropical, perfecto para estas hermosas plantas en flor.
Fertilización
El cuidado de su jazmín brasileño puede ser una tarea que merezca la pena. La tierra de la maceta debe contener abundante materia orgánica, como musgo o compost, para proporcionar la nutrición necesaria sin necesidad de abonar en exceso.
Cuando la tierra de la maceta empiece a secarse, debes abonarla con un fertilizante equilibrado que contenga elementos como nitrógeno y fósforo. Esto ayudará a maximizar la floración y dará a toda la planta vigor y robustez, convirtiéndola en una gran adición a cualquier espacio vital.
Un abono de liberación lenta también es útil si temes fertilizar en exceso o no tienes tiempo para atender regularmente las necesidades de tu planta: así te asegurarás de que reciba nutrición sin quemar sus raíces.
Poda y propagación
En cuanto a plantas tropicales, el jazmín brasileño es una belleza sobresaliente. Sus características ornamentales y aromáticas la convierten en una elección popular para cualquier jardinero aficionado a las plantas.
Cuidada adecuadamente, esta enredadera tropical puede aportar una luminosidad y una sensación tropical inigualables a sus espacios exteriores con sus hojas de color verde brillante y sus fragantes flores blancas que florecen durante todo el año.
Podar y propagar su Jazmín de Brasil con regularidad le ayudará a conseguir plenitud o tamaño de la mejor manera posible. La primera ayuda a evitar que las enredaderas crezcan en exceso, eliminando el crecimiento muerto y permitiendo una mayor circulación del aire entre el follaje.
Estas últimas, propagadas mediante esquejes o semillas, pueden producir más de estas hermosas plantas para disfrutarlas durante años.
Toxicidad del jazmín de Brasil
Cuando se trata de plantas de interior, el jazmín brasileño es una de las variedades más atractivas. Con sus fragantes flores y su delicado follaje, puede hacer que cualquier hogar destaque fácilmente con un toque de belleza natural.
Aunque esta popular planta pueda parecer encantadora a primera vista, bajo su dulce aroma se esconde una verdad inquietante: ¡el jazmín de Brasil está considerado una de las plantas de interior más tóxicas!
Así que si estás pensando en añadir un poco de glamour ecológico a tu hogar, sigue leyendo antes de que te presentes (y presentes a tu familia) al peligro potencial que acecha dentro de estos bonitos pétalos.
Para los humanos
El jazmín brasileño, también conocido como jazmín estrella y flor nacional de Río de Janeiro, es una planta ornamental tropical que a veces se encuentra en todo Estados Unidos.
Aunque esta planta tropical no suele ser nociva para el ser humano, los alérgicos al látex corren el riesgo de sufrir una reacción anafiláctica tras el contacto con la savia, lo que supone un peligro mortal.
Es aconsejable manipular el jazmín de Brasil con guantes y enjuagar inmediatamente cualquier resto de savia sobre la piel o la ropa.
El sabor amargo de las flores disuade a la mayoría de los adultos de comerlas; sin embargo, los bebés y los niños pequeños deben ser vigilados de cerca con esta planta tropical, ya que es más probable que intenten mordisquear una de las flores.
Por seguridad, límpiales la piel si están expuestos a la savia y enjuágales la boca si muerden.
Para los animales de compañía
Aunque el comienzo de la primavera y el final del invierno son las épocas de mayor floración de plantas como el jazmín de Brasil, debe tener cuidado si tiene animales domésticos. El follaje y las flores de esta planta pueden ser demasiado tentadores para que se resistan gatos y perros, pero si se ingieren, pueden causar vómitos y diarrea graves.
Lo mejor es mantener las plantas fuera de su alcance. Por suerte, esto es fácil de hacer con una cesta colgante, que a menudo puedes podar para asegurarte de que nadie se acerque a ellas.
Mantener su jazmín brasileño fuera del alcance de su mascota ayuda a garantizar que el comienzo de la primavera y el final del invierno sigan siendo coloridos y seguros.
Problemas comunes con el jazmín brasileño
Ah, el jazmín de Brasil, ese precioso arbusto con flores fragantes y capaz de esparcir su belleza por todas partes. Pero aunque el jazmín de Brasil luce divino en nuestros jardines, cultivarlo puede ser todo un reto.
Desde veranos calurosos hasta condiciones de sequía, el cuidado de esta planta es cualquier cosa menos sencillo. Profundicemos en algunos problemas comunes a la hora de cultivar tus plantas de jazmín brasileño.
Plagas
Si cultiva su Mandevilla sanderi en interior en una maceta, puede tener problemas con las siguientes plagas del jazmín de Brasil.
Ácaros araña
El jazmín brasileño es una atractiva cubierta vegetal que puede aportar colores vibrantes a su jardín. Sin embargo, si no tienes cuidado, puedes encontrarte en medio de un brote de araña roja.
Estas plagas se encuentran con frecuencia en las plantas de jazmín de Brasil, causando pequeñas manchas de hojas amarillentas y masas de telarañas al alimentarse de la savia.
Si no se tratan, los ácaros pueden propagarse rápidamente por el jardín o el paisaje y causar graves daños a muchas especies de plantas.
La detección precoz es fundamental para controlar una infestación de arañas rojas, así que compruebe regularmente la cubierta vegetal en busca de signos de estos molestos bichos.
Pulgones
De vez en cuando, las cestas de jazmín brasileño de su porche o patio pueden enfrentarse a los pulgones, unas plagas diminutas con forma de pera que suelen encontrarse en racimos reuniéndose alrededor de los capullos y los tallos.
Aunque puede resultar molesto descubrir a estos pequeños intrusos haciendo autostop en nuestras plantas, son bastante comunes y fáciles de tratar.
En los casos más graves, puede ser necesario deshacerse por completo de la planta para evitar que la infestación se propague. La ventaja es que las atractivas cestas colgantes del jazmín de Brasil siguen siendo fáciles de conseguir, de modo que cuando una cesta llegue a su fin, podrá encontrar fácilmente otra para sustituirla.
Cochinillas
Uno de los problemas más comunes del jazmín brasileño son las cochinillas. Estas plagas suelen infestar tallos y hojas flexibles, y su número puede aumentar rápidamente debido a su rápida tasa de reproducción.
Se alimentarán de la savia del interior de los tallos, dejándolos amarillentos y antiestéticos. Por eso es esencial conocer a tiempo los signos de una infestación y tomar medidas contra ella lo antes posible.
La mejor opción para la prevención es la poda regular para mantener el jazmín brasileño sano, lo que también reducirá las zonas donde estos insectos puedan encontrar lugares cómodos para pasar desapercibidos.
Cómo solucionar los problemas de plagas en el jazmín brasileño
Recorta cualquier brote dañado y utiliza jabón insecticida para las plagas restantes. Inspecciona la planta con regularidad en busca de daños o plagas y elimínalos lo antes posible antes de que surjan problemas más graves.
Otra forma estupenda de combatir un problema de plagas es introducir en la zona insectos beneficiosos como mariquitas y crisopas. Estos insectos se alimentan de algunas plagas comunes del jardín y pueden mantener tu jazmín brasileño sano y próspero.
Enfermedad
Preste atención a la cantidad de humedad que recibe su Mandevilla sanderi para evitar las enfermedades del jazmín brasileño.
Mancha foliar
El jazmín de Brasil es un arbusto de flores hermosas y fragantes. Sin embargo, es propenso a la enfermedad articular mancha foliar.
Si no se controlan ni se tratan, las manchas foliares pueden debilitar la planta, decolorar sus frondosas hojas y provocar una incapacidad para florecer plenamente.
Afortunadamente, los tratamientos para combatir este problema incluyen la poda de las partes poco saludables de la planta, el uso de un fungicida según lo recomendado por su experto local en jardinería, y el mantenimiento de un riego regular evitando el exceso de riego.
Pérdida de raíces
La podredumbre de la raíz es una enfermedad común del jazmín brasileño, y puede estar causada por un riego excesivo y por mantener los sistemas radiculares en un suelo que no drene bien. Para evitarlo, asegúrese de que el suelo esté seco y nunca empapado, sobre todo durante la época de floración.
Además, si se reduce la cantidad de mantillo y fertilizante suplementario que recibe el jazmín brasileño y se aumenta la exposición del sistema radicular al aire, se puede evitar este problema.
En estas condiciones, adoptar un suelo bien drenado y una humedad óptima garantizará el control de la podredumbre de las raíces.
Cómo curar enfermedades en el jazmín brasileño
Controlar las enfermedades del jazmín brasileño puede ser difícil, pero no tiene por qué serlo. Para mantener la planta sana y libre de enfermedades, dale suficiente luz.
Los jazmines brasileños prosperan con luz brillante, así que busque un lugar soleado con al menos cuatro horas de sol directo al día y luz solar por la tarde si es posible.
Aunque una exposición excesiva al sol puede amarillear los márgenes de las hojas, la cantidad de sol adecuada dependerá de lo caluroso o frío que sea su clima: experimente y ajústese en consecuencia.
Con los cuidados adecuados, su jazmín de Brasil debería poder mantenerse libre de infecciones y tener un aspecto estupendo durante todo el año.
Conclusión
Aunque el jazmín de Brasil es una planta de interior bonita y fácil de cuidar, hay que tener en cuenta algunas cosas a la hora de cuidarla.
Asegúrese de proporcionar luz brillante e indirecta y de regar cuando la tierra esté seca al tacto. Con los cuidados adecuados, su planta de jazmín brasileño prosperará y llenará su hogar con su dulce fragancia.